8. Que fluya el agua

Así como en Refidim el pueblo de Israel, nuevamente tuvo sed, Dios les mostró que necesitaban confiar en Él, y justo después de eso, el pueblo se entregó a la idolatría en el monte Sinaí. En nuestra vida financiera sucede algo similar que nos puede alejar de las bendiciones de Dios. Descúbrelo en este módulo.